Gustav Mahler

Gustav Mahler
Mahler un creador errante
"Soy apátrida por triplicado: nativo de Bohemia en Austria, austriaco entre los alemanes y judío en todo el mundo.
Siempre un intruso, nunca bienvenido."
Gustav Mahler

lunes, 17 de febrero de 2014

Primeras obras de un gran compositor

Das klagende Lied (La canción del lamento)

En 1880 terminó una cantata dramática, la Das klagende Lied (La canción del lamento), siendo ésta, su primera obra de peso, es una de las pocas que han sobrevivido hasta nuestro tiempo en su forma original (el movimiento del Cuarteto para Piano en La menor se cree que es de 1876).  Esta cantata tiene clara influencia de Wagner y Bruckner, pero incluye muchos elementos musicales que lo caracterizarán a posteriori, en lo que el musicólogo Deryck Cooke describe como «puro Mahler».  El borrador del texto está fechado el 18 de marzo de 1878, y la composición la inició en el otoño de 1879, siendo completada el 1 de noviembre de 1880.  La obra se presenta en un escala muy grande y compleja, requiriendo una gran orquesta y llevando entre 60 y 70 minutos su interpretación completa.  Entre 1893 y 1898 la sometió a varias revisiones y cambios. Su primera representación se llevó a cabo en 1901, en forma revisada y abreviada.  Participó con la obra en un concurso de composición; para ayudarse a decidir si dedicarse a la composición o a la dirección de ópera.  Desafortunadamente no ganó, debido a las ideas innovadoras de Mahler, incluyendo una pequeña orquesta fuera de escena, que chocaron con un jurado muy conservador, presidido por Johannes Brahms.

Mahler desarrolló interés por la filosofía alemana y su amigo Siegfried Lipiner lo introdujo en las obras de Arthur SchopenhauerFriedrich NietzscheGustav Theodor Fechner y Rudolf Hermann Lotze.  Filósofos que continuaron influyendo en su obra.  El biógrafo Jonathan Carr afirma que la cabeza del compositor «no sólo estaba llena del sonido de las bandas bohemias, toques de trompeta y marchas, corales de Bruckner y sonatas de Schubert. También estaba palpitante con los problemas de la filosofía y metafísica que había tratado de resolver, con Lipiner».

En el verano de 1880 Mahler tuvo su primer trabajo como director de orquesta profesional, en un pequeño teatro en la ciudad balneario de Bad Hall, al sur de Linz.  El repertorio estaba formado exclusivamente por operetas; en palabras de Carr, fue «un trabajo un poco triste», que Mahler aceptó sólo después de que Julius Epstein le aseguró que su trabajo pronto mejoraría.

En 1881 fue nombrado director en el Landestheater de Liubliana (en esa época llamada Laibach, en Eslovenia), donde la compañía, pequeña pero con recursos, estaba preparada para intentar obras más ambiciosas. Allí, Mahler dirigió su primera ópera a gran escala, Il trovatore de Verdi, una de las más de 50 que presentó durante esa época en la ciudad.  Después de permanecer seis meses en dicho cargo, regresó a Viena y trabajó a tiempo parcial como maestro del coro del Carltheater de la ciudad.  


Casa de Mahler en Olmütz (Olomouc)


En enero de 1883 Mahler se convirtió en director de un destartalado teatro de Olomouc.  Posteriormente escribió: «Desde el momento en que crucé el umbral del teatro de Olomouc me sentí como uno que espera la ira de Dios».  A pesar de la pobre relación con la orquesta, Mahler llevó cinco óperas nuevas al teatro, incluyendo Carmen de Bizet, y se ganó a la prensa que inicialmente había sido hostil con él.  Después de una semana a prueba en el Teatro Real de Kassel, Mahler se convirtió en el «director coral y musical» del teatro, cargo que ocupó desde agosto de 1883.  El título ocultaba la realidad de que estaba subordinado al maestro de capilla, Wilhelm Treiber, que estaba disgustado con él y se propuso hacer su vida miserable.  A pesar de la atmósfera desagradable, Mahler tuvo momentos de éxito en la ciudad.  Dirigió la representación de su ópera favorita, Der Freischütz de Weber y el 22 y el 23 de junio de 1884 dirigió su propia música incidental para la obra de teatro Der Trompeter von Säkkingen (El trompetista de Säkkingen) de Josef Viktor von Scheffel, la primera representación pública profesional de una obra del compositor.  

Primeros compases de la primera edición de la obra (1897)

Una ardiente pero breve relación sentimental con la soprano Johanna Richter,  a quien conoció mientras ejercía como director de la Casa de Ópera en Kassel, Alemania, hizo que Mahler escribiera una serie de poemas de amor que se convirtieron en el texto de su ciclo de canciones Lieder eines fahrenden Gesellen (Canciones de un compañero de viaje), compuestas entre 1884 y 1885 y publicadas en 1897.  Hay fuertes conexiones entre este trabajo y su Sinfonía N°1, siendo el primer tema de la segunda canción el tema del primer movimiento de la sinfonía y el verso final de la cuarta canción reaparece en la primera "Marcha Funeral" de la misma.  La letra de estas canciones se puede ver aquí

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